Una visita [Hela]

Había decidido ir a ver a mi madre en su reino, estaba seguro de que se alegraría mucho de verme por lo que fui abriendo un portal hacia el Helheim y en vez de abrirlo en los niveles inferiores del mismo lo abrí directamente en la Judesca dónde estaba el palacio de mi madre; entré en el palacio y recorrí sus largos pasillos iluminados solo con antorchas llameantes, habían puertas a un lado y columnas al otro lado dónde solo había oscuridad. Las puertas estaban cerradas y ocultaban muchos secretos, me encontré con varias almas y con algunos que trabajaban para ella saludandolos con la cabeza mientras que pasaba hasta una gran puerta de hierro forjado y labrado con escenas de muchas clases; suspiré y apoyé las manos en la misma abriendola y me abro paso hasta la sala del trono que estaba vacía, ladeo un poco la cabeza y pasé adentro subiendo las escaleras hasta arriba y miré el trono. Tuve la iniciativa o la tentación de sentarme en el mismo por lo que lo hice sentandome en el trono antojándome muy cómodo

Estaba en el despacho poniendo los papeles en las carpetas y estas en las estanterías, el despacho a simple vista era pequeño y estrecho lleno de papeles que no dejaban pasar, pero era mas grande y todo lo que no se veía estaba oculto por hechizos.

Sentí la presencia de Agni y sonreí dejando los papeles, salí del despacho y fui hacia la sala del trono donde estaba. En vez de abrir la puerta desaparecí y aparecí detrás del trono haciendo que muchos brazos acariciaran el cuerpo de Agni y mis manos también.

Hola, amor

Ni me lo esperaba, sinceramente no me esperaba nada de nada; tenía los ojos cerrados y la cabeza en el respaldo del trono cuando de repente sentí muchos brazos y manos acariciando mi cuerpo escuchando la voz de ella, aquello como que me sorprendió de sobremanera e hizo que pegara un brinco saliendo del trono y por que poco no me caigo escaleras abajo aunque sería un espectáculo; suspiré cerrándo los ojos y despues la miré llevando la mano hacia el pelo sobandome la nuca, respirando algo más tranquilo por el tremendo susto que me había llevado

-Hola ma...lamento haber ocupado tu trono, esque...tenía la tentación además de que se estaba tan cómodo....

Dije un poco azorado la verdad, sabía que estando you la atraería como se atrae a las moscas con la miel pero no tenía en mente de que ella usara ese truco conmigo y llevarme el susto de mi vida; aunque...a decir verdad...no me había asustado demasiado, solo me había sorprendido un poco bastante.

Me levanté al ver el brinco que dio y me lo quede mirando riendo un poco, había estado divertido aquello, me acerque a él sin dejar de mirarlo sonriendo.

Si hubieras sido otro, puede que me hubiera enfadado - sonrei y le acaricie el pelo - Se que es muy cómodo - solté una risita y le di un beso en la frente y me senté en el trono.

Hice un gesto para que se sentara en mi regazo sin dejar de sonreirle

Suspiré sonriendo, era verdad si hubiese sido otro que se hubiese sentado en el trono se habría enfadado y no era muy agradable verla enojada aunque sinceramente chicos...yo nunca la había visto enojada; ladeo la cabeza un poco y despues me acerco a ella sentandome encima suyo rodeandole el cuello, algunas veces, que iba a visitarles, me sentaba en el mismo sitio como si fuera un crío pequeño. Suspiré de nuevo cerrándo los ojos y despues la miré con una sonrisa, me gustaba visitarla de vez en cuando aunque con las cosas que pasaban en la Tierra pues no estaba muy seguro si ella habría venido a verme allá pero no le daba muchas vueltas al asunto; la miré con una sonrisa

-Mucho trabajo?

Sonreí cuando se sentó y le rodee la cintura con un brazo mientras le apartaba el pelo de la cara para verlo mejor. Le di un beso debajo de la nuez y luego lo abrace acercándolo mas a mi.

Me encantaba tenerlo así de cerca cuando venia a vernos, suspire con su pregunta pero le sonreí igual.

Han bajado algo las muertes de la gente, por suerte.. creo - alce una ceja y luego reí divertida - Hace tiempo que no subo para llevarme a alguien. Si subo ya te are una cortita visita - sonrei y le di un beso en la mejilla.

Cualquiera que nos viera diría mas bien que somos pareja y no madre e hijo y eso lo hacía divertido

La escuché con una sonrisa, asentí cuando dijo que cuando subiera vendría a hacerme una corta visita; suspiré dejando que me diera un beso debajo de la nuez y que me apartara el pelo de la cara para que me viera mejor, la miré con una sonrisa y le tomé un largo mechón de su pelo rubio olisqueandolo cerrándo los ojos. Había una cosa en la cual caí en la cuenta, hacía mucho que no me sentía mal cuando se acercaban lluvias...es más ni siquiera había llovido en mucho para que pudiera sentirme mal y acabar siendo lo que realmente soy pero no me iba a comer la cabeza con esas divagaciones; suspiré de nuevo cerrándo los ojos y caí en la cuenta de que no había sentido la presencia de papá, la miré a ella ladeando la cabeza a un lado

-Y pa?

Seguí dándole mimos mientras él olisqueaba un mechón de mi cabello, no es que oliera muy bien pero bueno, me pegue a su cuello y se lo olisquee hasta que preguntó aquello.
Me separé lo justo para verle y sonreí.

A salido - me encogí ligeramente de hombros sonriendo - No creo que tarde mucho en regresar -ladee un poco la cabeza y le di un pico

Rio un poco por las cosquillas cuando me olisqueaba el cuello, escuché lo que me decía y asentí; noté su pico y se lo correspondo, ladeo la cabeza mirándola y sonreí abrazandola cerrándo los ojos, me gustaba sentirla cerca ya que hacía que me sintiera protegido y seguro. Suspiré cerrándo los ojos hechándole el aliento encima y despues le muerdo, juguetón, el cuello; quería divertirme un poco aunque fuera mi madre me daba igual ya que sabía que solo se quedaría en eso, una relación madre e hijo aunque mi idea de divertirme se divulgaba en dos puntos de vista y entonces la toma de la mano saliendome de encima suyo tironeando de ella. Quería entrenarme un poco con ella aunque sabía que eso lo hacía con Orestes y ella solo se limitaba a vernos como lo hacíamos pero...ahora que él no estaba para que entrenaramos juntos y la tenía a ella más a mano pues...entrenaría con ella.

Cerré los ojos cuando me abrazó, correspondiendolo , solté una risa cuando me mordió el cuello. Olisquee su aliento cuando suspiró y luego sonrei levantandome cuando comenzó a tironear de mi.

Esta bien, entrenare contigo un poco - sonrei bajando las escaleras y comence a caminar hacía el centro del salón

Sonrio cuando dijo eso, fuimos escaleras abajo y fuimos hasta el centro del salón; yo me puse en un extremo y ella en otro, la miré con fijeza y empecé a moverme hacia un lado sin dejar de mirarla. Nos movíamos mirandonos fijamente como estudiandonos y en el sentido comntrario a las agujas del relog, se veía que ninguno de los dos ibamos a ceder para empezar a atacar pero adivinando sus intenciones enseguida me puse en posición de defensa con mi guardia alta siempre.

Me hice una coleta ya que no quería que se me enredase el cabello y comencé a caminar sin dejar de mirarlo como él también hacia. Ladee la cabeza cuando vi que se ponía en guardia, sonrei dando un salto hacia él y desaparecí volviendo a aparecer esta vez con una espada en la mano y la moví como si fuera a cortarlo en diagonal

Me muevo con agilidad y haciendo un salto lateral, tomé la espada que estaba en el suelo y me puse en guardia otra vez apuntandola; ladeo un poco la cabeza y me lanzo contra ella para atacarla por un lado pero le hago una finta y la ataqué por otro lado dandome la vuelta apoyando mi cuerpo en el suyo y me situé a su espalda golpeandola con el mango de mi espada mirándola con una sonrisa suspirándo poco despues para despues separarme de ella sin dejar de verla.

Solté un pequeño jadeo cuando me dio el golpe en la espalda, sonrei levemente y me gire hacia él lanzando-le una bola eléctrica de pequeño voltaje y yendo hacia él me puse a su espalda y me senté en sus hombros rodeando-le el cuello con mis piernas y tapándole los ojos con mis manitas.

Quien soy?~ - pregunte con voz cantarina inmovilizándolo

Recibí la esfera electrica de poco voltage y entonces noté como se sentaba en mis hombros y me dejaba completamente ciego, aquello no era justo; me quedé parado e inmovilizado como me tenía ella escuchando su cantarina voz, suspiré completamente ciego y dejé caer la espada levantando las manos en señal de rendición y le dije las siguientes palabras estando ciego y además desarmado:

-vale, vale, tú ganas, me rindo!!

Sonreí amplio cuando vi que dejó caer la espada, antes de quitarme de encima suyo y quitarle las manos las pase poniendole una cinta para que no viera y me bajé de encima atandole la cinta en la nuca.

Me puse delante suyo y le di un beso en los labios luego me aleje mucho de donde estaba él.

Usa tus otros sentidos para saber donde estoy - dije disminuyendo mi energia a la de una hormiguita y espere a que viniera

-Malvada

Dije despues de no ver practicamente nada al tener esa venda en mis ojos y despues de sentir su beso en mis labios, me los mojé practicamente con la lengua escuchando lo que decía de usar mis otros sentidos; a pesar de ser el leviathan tenía una habilidad muy oculta y la descubrí en mi primer año estando en la Academia Solace, era la percepción del aura y era capaz dce percibir el aura de cualquier cosa. Me estuve concentrando agudizando mis otros sentidos y despues la busqué activando dicha habilidad, fue avanzando en línea recta viendo el reflejo espectral de la sala y por supuesto su energía aunquer reducida a la de una hormiguita la podía percibir claramente.

Fui avanzando hacia ella con seguridad y sin vacilar en mis pasos, si ella cambia de posición la seguiría al sentir su proximidad a mi y por lo tanto su energía disminuida adrede para ponerme a prueba desde el momento en que me vendó los ojos con aquella venda blanca; ladeo la cabeza un poco hasta que doy con ella tomándola del rostro con suavidad y tocandole las mejillas sonriendo.

-Aquí estás

Solté una risita viendo como se acercaba y me iba moviendo poco a poco aunque suponía que igualmente podría percibirme, así que seguí moviéndome viendo como se iba acercando.

Deje de moverme y vi que me tocaba la cara, volví a reír y le acaricie las suyas, volví a darle un beso en los labios y le quité la cinta, le mire con una sonrisa cuando me separé y ladee la cabeza.

Y a que jugamos ahora?

Sentí que me daba otro beso en los labios y despues sentí como la venda se deslizaba por mis ojos, al abrirlos pude ver al fin; parpadeo varias veces para acostumbrar mis ojos a la luz natural y escuché su pregunta, me quedé pensando unos momentos pero nada se me ocurría en aquel momento por lo que suspiré cerrando los ojos. Me separé de ella dándole un beso en la comisura del labio para despues subir las escaleras hasta arriba del todo y usurpé el trono de mi madre sentandome y me acomodé en el mismo llevando mis brazos a los reposabrazos, mi mano derecha, al cerrarse, emite un sonido metalico y cerré los ojos recargando la cabeza en el respaldo alto.

Me lo quede mirando tranquilamente, mientras esperaba a que dijera algo, sonrei por el beso en la comisura del labio y cuando se puso a caminar lo seguí tranquilamente, al ver que se sentaba en el trono comencé a reír viendo como se acomodaba.

Subí las escaleras y me senté entre sus piernas en el suelo e hice aparecer un libro sobre Vlad Tepes y se lo mostré.

Me lees un cuento? - sonrei poniendo carita de niña buena

La miré y vi que se sentaba en el suelo pero entre mis piernas por lo que solo sonrio y veo que me tiende un libro y me dice que se lo lea, otra sonrisa se figura en mi rostro tomándo el libro; miré su cubierta y despues ojeo el libro un poco por encima para ver de que se trataba, despues la miré a ella con una sonrisa y despues empecé a leerselo como un cuento empezando por la típica frase de: "Érase una vez..." mi lectura al principio no era muy buena ya que llevaba de mucho que no tocaba un libro y mucho menos para leerlo en voz alta y delante de alguien pero...a medida que avanzaba poco a poco con la historia de ese tipo pues ya empezaba a tomar mayor confianza en mi mismo y mi lectura se volvió más fluida y las palabras salían seguras y sin tropiezos como antes.